COMPLIANCE
Este término ha ido adquiriendo una gran relevancia en la gestión empresarial actual, y significa en su traducción al español “cumplimiento”, haciendo alusión a un área dentro las organizas de las compañías que se enfoca en generar, gestionar y monitorear políticas, procedimientos y controles que apuntan al cumplimiento de la misión y visión de la empresa y por supuesto al cumplimiento de la buenas y leales prácticas empresariales, a un comportamiento ético empresarial adecuado y por ende al cumplimiento de la normativa legal existente.
Esta práctica, ya masificada en el mudo empresarial, ha ido generando una serie de beneficios y ventajas competitivas para las empresas observantes de dicho estilo empresarial, así las cosas, genera confianza en los negocios, aplica un estilo de negociación acorde con estos principios, donde el comportamiento se limita a desarrollarse dentro de los límites de la ética y del comportamiento esperado por el grupo social empresarial, aumentando así el prestigio de la compañía, protegiendo y definiendo un estilo de comportamiento de todos los integrantes de la organización, sin importante el nivel jerárquico, sino que siempre mirando un estilo común aceptado por todos los miembros de la organización.
Este estilo, se visualiza a través de una serie de normativas de cumplimiento interno, que son exigibles para los miembros de la organización, como el Código de Conducta, la protección de datos al interior de las organizaciones y el sistema de prevención del delito, entre otros, toda vez que modela el comportamiento de los miembros de la organización y los mantiene dentro de las normas éticas generalmente aceptada por la industria.
Luego, esta normativa comienza en Chile a partir del año 2009, aproximadamente coincidente con la incorporación de Chile a la OCDE (Organización para la cooperación y el desarrollo económico), organización internacional a la que pertenece nuestro país, y cuyas políticas cada día, generan nuevos seguidores, valorando los principios y políticas que esta organización promueve.
Lo anterior es importante, porque cada día más empresas, tanto en el ámbito nacional como internacional, cumplen voluntariamente su normativa y la hace suya, por lo tanto, estas empresas generan sinergia con empresa con las que comparte principios comunes dentro de los negocios, de ahí viene, la gran valoración que tanto, proveedores como clientes, les otorgan a las empresas que se guían por principios y políticas de Compliance.
Si bien hay distinto tipos de compliance, nuestra referencia es genérica, y esta dependerá de cada compañía, la nuestra, ha sido precursora de estas políticas y ha avanzado muchísimo en estas prácticas en el tiempo, generando los instrumentos de regulación, designando a las personas adecuadas en cargo de este tipo, y determinando con precisión las responsabilidades, aportes y roles que cada uno cumple dentro de la organización.
Como muestra, el sistema de prevención del delito, que podemos desarrollar para su compañía, cumple como rol principal, la prevención de delitos, que evita o minimiza la ocurrencia de la participación delictual de algún miembro de la organización, lo que podría además de la responsabilidad individual generar responsabilidad corporativa y eso es precisamente lo que el sistema pretende evitar, protegiendo así a la organización y al grupo de empleados y colaboradores que cumplen rigurosamente con su normativa.
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